Vacaciones con nuestro gato

Se acercan fechas señaladas en las que disfrutaremos de puentes y vacaciones. Si vamos a salir de viaje deberíamos consultar a nuestro gato qué prefiere: quedarse en casita o viajar con nosotros. Si pudiera responder probablemente optaría por no moverse de casa. Los felinos son poco amigos de los cambios. Les incomoda y estresa abandonar su territorio y sus olores, sus rutinas…

Lo más aconsejable es dejar las llaves de casa a una persona de confianza que pueda hacerse cargo de las necesidades básicas del gato (comida, areneros limpios y algún mimo). Aún mejor si el gato ya conoce a esta persona. Existen también residencias para mascotas y la opción de dejar a nuestro gato en casa de algún familiar o amigo; pero como ya hemos indicado: el gato preferirá, salvo excepciones, no abandonar su hogar.

Si optamos por dejarle solo en casa, debemos prepararle varios comederos y bebederos en distintas zonas de la casa, así como uno o dos areneros extra. También dejaremos a su alcance sus juguetes y rascadores y una camita o mantita extra. Si bien es cierto que la percepción del tiempo no es igual para el gato que para el ser humano y que son capaces de aguantar largos periodos solos sin aburrirse, y que son más independientes que un perro, no por ello podemos dejarle solo en casa varias semanas. Si finalmente decidimos viajar con nuestro gato, hay una serie de consejos a tener en cuenta:

    • En primer lugar, si por nuestra profesión o bien por cuestiones personales viajamos a menudo y queremos que nuestro gato nos acompañe, podemos habituarlo desde pequeñito al transportín, de modo que no extrañe los paseos en coche, las aglomeraciones del tren, del avión o de las terminales.
    • En segundo lugar, del mismo modo que preparamos nuestra maleta, debemos preparar la suya. Es decir: debemos tener en cuenta qué necesitará durante el trayecto y durante su estancia fuera de casa. Lo principal es disponer de un transportín de viaje adecuado, que además es aconsejable llevar cubierto con un paño o tela para aislarlo del exterior y hacerle sentir aún más protegido. También colocaremos en el transportin un empapador. Por otro lado, deberemos llevar comida y agua, algún juguete y una mantita. Aunque procuremos su máximo bienestar, el gato se encontrará incómodo y es probable que no quiera comer o hacer sus necesidades. Así, también es recomendable ofrecerle comida y bebida aproximadamente una hora antes de salir de viaje. Además, aconsejamos evitar realizar paradas y sacar al gato del transportín: extrañará aún más el ambiente y podría angustiarse y tratar de escapar.
    • En tercer lugar, debemos llevar su cartilla de vacunación al día y, si viajamos al extranjero, el pasaporte. Además debe llevar microchip. Si viajamos al extranjero no estaría de más conocer los requisitos que exigen las normativas del país de destino. En concreto para países de la Unión Europea podemos consultar el esquema con los Requisitos sanitarios exigidos por los estados miembros de la Unión Europea para el movimiento de animales de compañía (perros, gatos y hurones).
    • Finalmente, cuando busquemos alojamiento en nuestro lugar de destino debemos asegurarnos que el hotel, hostal o residencia admite mascotas y en qué condiciones. Una vez instalados en nuestro alojamiento, da igual si es la casa de un familiar como si es un hotel, también dispondremos el espacio para nuestro gato (su comedero, su bebedero, su arenero y su refugio). También los medios de transporte públicos suelen establecer sus propias condiciones respecto a viajar en compañía de nuestras mascotas (tamaño, peso, costes…). Por lo general, si hablamos de gatos, no debería de haber ningún problema respecto al tamaño y al peso, y podría viajar con nosotros en cabina como equipaje de mano. Por supuesto también pueden ir en bodega. Por otro lado, cada vez son más los espacios que se declaran “petfriendly” y que admiten mascotas (cafeterías, restaurantes, tiendas…), aunque lo cierto es que el concepto parece más pensado para perros, sabemos que no habrá problemas si acudimos con nuestro gato.

Como siempre esperamos haber sido de utilidad y para concluir señalaremos que lo fundamental es conocer a nuestro amigo, sus necesidades y en caso de viajar contemplar en la medida de lo posible sus preferencias.